Capítulo 2: Todo tiene su lado malo.

Levabamos unas semanas en nuestra nueva vida en Inglaterra, todo iba bien. Aunque Cami y yo constantemente teníamos estas pequeñas peleas o discusiones que nos sacaban de quicio a las dos, a veces eramos insoportables.
La noche del viernes llegó y Camila estaba enojada conmigo por que sí, bah, creo que tenía un motivo, pero yo estaba de mal humor y no había escuchado su explicación, discutimos a los gritos y me harté.
 - Bueno, sino te gusta te hubieras buscado a alguien más perfecta como vos! – Grité, sabía cuanto le molestaba que yo dijera eso (mucho tiempo tuve problemas de autoestima y me comparaba demasiado con mis amigas, lo que me hacia sentir peor.) diciendo esto, me dirigí a la puerta y cerré con un portazo, me fui hecha una furia, no podia parar de pensar que no iba a aguantarlo por un tiempo indefinido con ella. Iba cruzando la calle, perdida en mis pensamientos, cuando un sonido estruendoso me obligó a volver a la realidad, una camioneta negra me golpeó, no a velocidad aparentemente, pero recuerdo haber sentido el impacto, luego de eso, todo fue negro.
Me levante y una luz blanca enseguecía mi vista, todo me dolía, admiré el pequeño cuarto de hospital y las máquinas a las que me encontraba conectada, había placas de mis huesos y mi cerebro sobre una luz, no entendí absolutamente nada. Ví una aguja en mi brazo hacia una máquina, entre en pánico e intenté moverme y una enfermera entro a verme.
Enfermera: Srta._______(t.a) no intente levantarse por favor y descanse un poco, tiene un leve traumatismo que será tratado en unas horas más.
______: *Pensamiento: de que mier#da esta hablando?* Eh? Traumatismo? Que pasó? Adonde diablos estoy?

E: La golpeó un auto y la dejo inconciente ahora descanse, ah y su novio la trajo aqui.
______: Novio? Tiene que haber algun error, eso es…

Un muchacho alto, con cabello castaño, ojos claros y facciones que parecían irreales entró al cuarto. Pensé que mi vista me fallaba, o el golpe me había dejado más loca imposible, no podía ser él. No era posible que fuera esa persona que todos los días provocaba en mi una sonrisa, él era que me había hecho llorar incontables veces, esa persona que me parecía simplemente perfecta.
Se acerco timido y delicado a mi cama y se sentó a mi lado.
X: Hola, estas bien ? me llamo Louis, Louis Tomlinson.

_____: Ehm, sí, algo adolorida pero bien *WTFFFFFFF, ESTO ES REAL?*
Louis: Perdóname, enserio – sus ojos se tornaron llorosos – yo iba manejando, no te ví lo juro.

______: No es nada… - interrumpe –

Louis: Sí, claro que lo es. Discúlpame enserio, no quise hacerlo. No estaba prestando atención ni veía con claridad.

______: Enserio, no te preocupes, voy a estar bien.
Louis: No sos de acá no ?
______: Ehm, no. Soy tan obvia?

Louis: No, pero tu acento y el hecho de que no reclames nada como las demas te hace bastante diferente.
______: Jajajaj, bueno gracias, creo (?)
 - Interrumpe -
Enfermera: Srta, deberá pasar la noche en el hospital y la operación se pospondrá hasta mañana.
______: Bueno, si no hay otra opción… usted estara aquí conmigo?
Louis: No! Digo, no hace falta. Yo me quedo con ella enfermera.
Enfermera: Ehm…